Para ascender a niveles de funcionamiento mental superior es necesario ser más inteligente y mejor persona. Muchas personas se entrenan, leen mucho y realizan infinidad de cursos; sin embargo, no logran cambios significativos. Las razones son muchas 1. Olvidan que la estructura mental está formada por infinidad de factores (biológicos, intelectuales, afectivos, sociales, morales, espirituales, principios, valores, creencias, criterios, hábitos...) y que es necesario tomar en cuenta todos estos factores porque el ser humano funciona como un todo. Todos los hábitos están relacionados entre sí y dependen unos de otros, por lo cual, no podemos producir cambios significativos en un aspecto si no mejoramos los demás aspectos. Es importante, tener presente que todos nuestros actos, derivan del inconsciente, creado por las influencias hereditarias que son las huellas ancestrales que forman el alma de las razas. Esta herencia nos llega a través de la educación recibida de nuestros padres, sobre todo en los primeros años. Adquirimos de forma inconsciente: principios, valores, creencias, actitudes y formas de reaccionar que nos modelan para el resto de la vida. Los motivos de nuestros actos son: desconocidos, secretos, profundos y ocultos. En cierto modo, los padres programan a sus hijos para el éxito o para el fracaso. Luego, la experiencia, el libre albedrío y la reflexión, nos ayudan a tomar el control de nuestra vida. Este control es consciente sólo en un pequeño porcentaje. La mente de las personas es como un iceberg, del cual sólo conocemos una pequeña parte, el resto permanece oculto y no tenemos acceso a él; sin embargo, esta parte oculta, conocida como inconsciente, constituye la estructura profunda de nuestra personalidad. Esta estructura es dinámica y poderosa, en ella se generan los procesos mentales que determinan nuestra forma de percibir las cosas, de sentir, de pensar y de actuar. 2. Todo cambio se inicia en la mente. Para adquirir conductas superiores es necesario cambiar la dinámica de la mente, lo cual no es fácil porque funcionamos en base a hábitos adquiridos a través de los años. Estos hábitos han automatizado nuestras conductas y, en cierta forma, somos esclavos de los hábitos. Los seres humanos creemos que tomamos decisiones libremente, pero las cosas no son así. Tenemos programaciones a nivel inconsciente y subconsciente, grabadas desde la infancia, las cuales se han ido modificando o consolidando a través de los años. Estas programaciones subconscientes constituyen la estructura profunda de nuestra personalidad y son las que determinan nuestras conductas. Esto explica por qué muchas veces queremos hacer algo pero actuamos de una forma muy distinta. Se debe a que nuestro poder consciente es débil ante la dinámica poderosa de la mente inconsciente. El subconsciente de muchas personas es pobre y negativo, en consecuencia su mente consciente también es pobre y negativa, sin embargo, existen técnicas eficaces para programar la mente, de modo que, aún en circunstancias adversas, el ser humano puede reprogramar su mente. Además cuenta con un instinto y una inteligencia que le impulsan a buscar el éxito. 3. "Ningún problema puede resolverse desde el nivel en el cual se ha producido" Para liberarse de hábitos negativos es necesario funcionar a un nivel mental superior. Para funcionar a un nivel mental superior es necesario activar el cerebro, dejar de lado muchas conductas inútiles e ir directamente a lo importante de las cosas. Esta actitud supone una visión de la vida que no tenemos, pero podemos adquirir. Muchas personas podrían llegar a ser genios, pero, debido a una pobre educación, su mente carece de contenidos valiosos sobre los cuales podría trabajar el cerebro; en consecuencia, son potencialmente genios, pero, en la práctica son ignorantes. Esta realidad nos da idea de lo importante que es leer todos los días sobre temas valioso y lo necesario que es activar constantemente el cerebro con ideas poderosas, porque al final, el éxito y la felicidad están en la mente y su logro depende de la forma en que adquirimos conocimientos de valor y en la medida en que los estimulamos los mejores deseos. Al hablar de conocimientos nos referimos no sólo al estudio profesional, sino también, al conocimiento de los valores, de las artes y de los demás aspectos que constituyen la esencia de la verdadera cultura. Si las personas percibieran la vida de una forma superior, comenzarían a actuar de una forma superior y si la capacidad que tienen y el esfuerzo que realizan lo invirtieran en la dirección correcta, todos serían triunfadores. El problema de la sociedad radica en una programación mental mediocre. Vivimos como autómatas, repitiendo todos los días las mismas cosas, a sabiendas de que son poco efectivas. Estamos atrapados en un círculo vicioso a la espera de que las cosas cambien en vez de capacitarnos para cambiarlas. Conscientes de esta realidad hemos diseñado el Proyecto Alfa, con el fin de estimular y activar la mente, de modo que las ideas, la motivación, la creatividad y las decisiones fluyan con rapidez y eficacia. Esta fluidez se logra con ejercicios muy simples que ayudan a las personas a descubrir sus grandes poderes. Cuando las personas se dan cuenta de lo que son capaces de hacer, despiertan a una nueva realidad. A partir de aquí el cerebro se programa por sí mismo y comienza a trabajar en la dirección correcta para cambiar lo que haya que cambiar. Muchas personas se esfuerzan por cambiar pero no logran su cometido porque se trata de cambios superficiales. Una buena programación mental debe ir dirigida a la estructura de la personalidad. Ahora bien: ¿Cuál es la mejor programación mental? Una buena programación mental es la que ayuda al ser humano a ser lo mejor que puede ser y a lograr lo más valioso que puede lograr. (Elabora una lista de las personas que consideras mejores personas y enumera sus cualidades fundamentales; elabora otra lista de las personas triunfadoras en las áreas en las cuales deseas triunfar y enumera sus cualidades. Ahora ya sabes cuál es el camino a seguir para la mejor programación. En la vida existen ideas, principios, valores y normas que ya han sido probados y que garantizan el éxito. Todos los conocemos, el problema está en que exigen esfuerzo y responsabilidad y, en consecuencia, son pocos los que apuestan por un desarrollo superior. La mayoría de las personas prefieren vivir en la mediocridad, porque a ella se acostumbraron. Si tuvieran conciencia de las oportunidades que pierden y del precio que deben pagar a lo largo de la vida, en forma de subdesarrollo, carencias y frustración, seguro que buscarían superarse. El hecho de que estés leyendo este tema indica que eres una persona privilegiada. Estás verdaderamente interesado en superarte; este es el paso fundamental. Ahora tienes que informarte bien y encontrar el método correcto a seguir porque existen muchos método, aparentemente maravillosos pero ineficaces.